El Quinto Suyo y el Districto Electoral peruanos en el Exterior
El Quinto Suyo y el Districto Electoral peruanos en el Exterior
Jorge Yeshayahu Gonzales-Lara
Jorge Yeshayahu Gonzales-Lara
La bancada de Alianza Parlamentaria propuso la creación de un distrito electoral para los peruanos residentes en el extranjero, con una representación de seis escaños en el Congreso de la República, informó la Agencia Andina.
El proyecto plantea modificar el artículo 21° y 239° de la ley N° 26859, Ley Orgánica de Elecciones, para que los tres millones de peruanos en el extranjero tengan representantes en el Congreso.
De acuerdo a la propuesta, “el territorio de la República se dividirá en 27 distritos electorales, uno por cada departamento, y los distritos restantes corresponderán a Lima Provincias, la Provincia Constitucional del Callao y el Distrito Electoral para los peruanos residentes en el extranjero”.
Asimismo, dispone que el Jurado Nacional de Elecciones asigne seis escaños a esa nueva jurisdicción electoral, con la siguiente distribución: tres representantes para los peruanos residentes en toda América, dos en Europa, y uno en Asia, Oceanía y África.
El Quinto Suyo y el Districto
Electoral peruanos en el Exterior
Electoral peruanos en el Exterior
Blog La Diaspora Peruana May 20, 2006
@Jorge Y Gonzales-Lara. Grande fue la sorpresa que provocó en
los partidos políticos peruanos, cuando en estas últimas elecciones
presidenciales y congresales del 9 de Abril del 2006, la diáspora peruana
ocupara el duodécimo lugar en la población electoral nacional, concentrando
electores de aproximadamente 14 departamentos del Perú; y con ello, marcando el
inicio de un nuevo tipo de ejercicio electoral en la vida política peruana en
general, y en particular para de la diáspora peruana. Sin embargo, luego de
tres años, los peruanos que forman la diáspora se sienten inadecuada o
nulamente representados en el congreso; debido a que ninguno de los 35
congresistas del Congreso peruano que fueron elegidos con el voto de esta
población, han tomado alguna iniciativa relativa a los peruanos residentes en
el exterior. Esta es la irónica realidad de los peruanos y peruanas que
migraron al exterior en busca de mejores horizontes, pero no olvidaron el Perú.
Para un mejor entendimiento la teoría transnacional se constituyó como una
herramienta que permite comprender las migraciones de las últimas décadas de la
globalización. Este concepto atraviesa sociedades teniendo en cuenta dos
parámetros fundamentales:
a) Los migrantes vinculan su país de origen con el país receptor a través del mantenimiento de relaciones sociales en ambos lados de las fronteras y construyendo un “espacio social transnacional”; y
b) Que la migración posee un carácter dinámico denominado “proceso transnacional”, que pone en relieve la construcción de campos que cruzan los bordes geográficos, culturales y políticos. Los transmigrantes mantienen y desarrollan múltiples relaciones –familiares, económicas, sociales, organizacionales, religiosas y políticas. (Basch et.al.1994: 7).
El "transnacionalismo" es definido como el proceso por el cual los migrantes construyen estos campos sociales que unen sus propias comunidades y sociedades de origen con las de asentamiento (Glick Schiller, Basch y Blanc-Szanton, 1992).
El voto transnacional
En esta ocasión, se plantea una
reflexión entorno a los efectos de los vínculos y prácticas transnacionales
generados por los migrantes en la articulación social, política y económica de
la sociedad global contemporánea. En especial el voto transnacional de la
diáspora peruana como un fenómeno transmigracional. El voto transnacional se
caracteriza en tres aspectos:
a. El migrante se vinculada a través
del voto transnacional en el cambio decisiones entre el país de residencia y su
país de origen, manteniendo relaciones sociales y políticas construyendo un
espacio transnacional simbólico e imaginario.
b. El migrante a través del ejercicio del voto transnacional le otorga un carácter dinámico en la participación política electoral, en el cual reproduce sus expectativas por los cambios sociales.
c. El migrante se afirma a través del voto transnacional a partidos que ofrecen discursos políticos más estables, la brecha derecha e izquierda es remplazada por la búsqueda del bienestar del país, y el discurso globalizador donde se sienten representados todos los sectores sociales, este puede ser imaginario o simbólico y muchas veces un mundo mágico maravilloso y se potencia en las experiencias positivas de la inmigración y la globalización informativa.
El voto representa una historia
migratoria
La identidad de la
gente se expresa cada vez más en un ámbito territorial distinto del Estado
nación moderno: con fuerza como en el caso de Cataluña, Euskadi o Escocia,
naciones sin Estado, o con acentos más matizados como en el caso de identidades
locales o regionales en casi toda Europa; (¿Fin del Estado nación? MANUEL CASTELLS).
Hace dos décadas que el Perú sufrió uno
de los momentos más difíciles y tormentosos de su historia una época en que la
grieta entre el Perú Legal y el Perú profundo se abrió, adoptando caracteres de
lo más violentos. Una violencia que fue cuajándose en el transcurrir de la
historia republicana del Perú y que terminó con uno de los mayores
derramamientos de sangre y miles de desplazados que fueron forzados a emigrar
voluntariamente e involuntariamente al exterior.
Tratando de cerrar esa herida se formó la Comisión de la Verdad y Reconciliación que
entre sus páginas señala:
“La toma de conciencia de la magnitud del daño causado a nuestra sociedad debe llevarnos a todos a asumir parte de la responsabilidad, aún cuando pueda y deba diferenciarse según grados. No solo la acción directa de los protagonistas, sino también la complicidad silenciosa o la desidia de muchos han contribuido a su manera a promover la destrucción de nuestra convivencia social. Debemos reconocer, pues, la naturaleza ética del compromiso por la reconciliación, es decir, debemos admitir que las cosas pudieron ocurrir de otra manera y que muchos no hicimos lo suficiente para que así fuese”. (Comisión de
Las migraciones de fines del siglo XX
tienen una dimensiones diasporicas. La diáspora peruana surge en un mundo de
migraciones globales, refugiados, asilados políticos, refugiados económicos,
fuga de talentos, entre otros que tiene como principales sujetos a personas que
se desplazan por el mundo. La diáspora peruana ha definirse en un mundo de las
migraciones globales, entre otros tiene como principales sujetos a personas que
se desplazan por el mundo; y vinculadas con el proceso de globalización,
independientemente de la raza o clase social, así como por otros grupos de
inmigrantes.
Cada voto representa una historia
migratoria, una decisión de vida. En cada diáspora de peruanos en el exterior,
por pequeña que sea, es una historia por contar. Las diásporas, esas
comunidades de cientos de migrantes que viven fuera de las fronteras de sus
países de origen, desafían la concepción tradicional del Estado-nación y obliga
a pensar en políticas que no se queden en lo nacional, sino contemplen
estrategias transnacionales. Es decir la definición clásica de “migrante” ya no
puede derivarse única y exclusivamente de la condición de residencia del
individuo, esto es, de la ubicación de su residencia habitual a uno u otro lado
de la franja fronteriza. Por el contrario, a la condición migratoria ha de
definirse más bien a partir de la incorporación y participación del individuo
en un sistema transnacional de redes sociales. El ejercicio del voto
transnacional ejercita el derecho a tomar decisiones desde el país de
residencia a su país de origen, este ejercicio es una simbología a los cambios
imaginarios o reales en términos del ejercicio de la democracia y la búsqueda
de bienestar real o/y imaginarias en al distribución de las riquezas, y la
migración como una experiencia positiva de la diáspora.
El transnacionalismo se ha convertido
en un elemento característico de las migraciones y en un eje de análisis clave
para entender el fenómeno migratorio contemporáneo. Ciertamente, aunque las
prácticas transnacionales entre los migrantes no son nuevas, resulta novedosa la
capacidad de la perspectiva transnacional de proporcionar una mira que permita
observar de otra manera los movimientos migratorios, en su doble condición de
consecuencia y causa de las grandes transformaciones que experimentan nuestras
sociedades. En este caso el Perú y la diáspora peruana.
Del mismo modo, el concepto
transnacionalismo no se limita únicamente a los fenómenos relacionados con la
migración sino que apela a un amplio conjunto de acciones, procesos e
instituciones que transciende las fronteras de los estados y/o de las
comunidades nacionales.
Los gobiernos de los países
latinoamericanos, tienen la necesidad de diseñar políticas novedosas que les
permitan potenciar la relación con sus diásporas en Estados Unidos y otros
países con una presencia de sus connacionales. Tanto las dimensiones como el
impacto que tienen las mismas en la vida nacional hacen cada vez más evidente
que en esta era de globalización informativa y acelerada migración, no se puede
gobernar de espaldas a estas comunidades. (Rafael Fernández de Castro.
Migrantes, votos, remesas: Las diásporas transnacionales.)
Las remesas son cantidades de dinero enviadas por inmigrantes a sus países de origen. Las cantidades anuales de dinero son tan inmensas que en algunos países han desplazado a las exportaciones tradicionales como la principal fuente de ingresos de la economía nacional.
A nuestro entender, sin embargo, se
trata además de una necesaria expansión y ampliación del concepto mismo de “migración”.
Si hubo un tiempo en que podíamos delimitar la migración como el flujo de
individuos y fuerza de trabajo, hoy en día es claro que debemos ampliar su
contenido incorporando la movilidad e intercambio de bienes culturales,
información, y recursos materiales.
Al migrar, en su propio desplazamiento,
el individuo no sólo lleva consigo su persona y su fuerza de trabajo, sino que
también lleva con él su cultura y su capital social. La migración así, no es
sino una forma particular en que las redes y el capital social y cultural de
una comunidad se expanden y consolidan en espacios cada vez más amplios y
distantes. Es en este contexto, que la diáspora peruana se ha venido
desplazando, y las remezas económicas son el resultado de la acción
social-económico-laboral en el país de residencia. Las remesas se han
constituido en la piedra angular de sostenimiento y corredor económico entre
los migrantes que desarrollan múltiples relaciones: familiares, económicas,
sociales, organizacionales, religiosas y políticas.
La diáspora peruana en cifras se estima
en 3’000,000 millones de peruanos y peruanas dispersos en 58 países entre
ellos: Alemania, Argelia, Argentina, Australia, Austria, Bahamas, Bélgica,
Belice, Bielorrusia, Bolivia, Brasil, Brunei, Bulgaria, Canadá, Chile, China,
Chipre, Colombia, Corea, Costa Rica, Cuba, Dinamarca, Ecuador, Egipto, El
Salvador, Eslovaquia, España, Estados Unidos, Estonia, Finlandia, Francia,
Grecia, Guatemala, Honduras, India, Indonesia, Israel, Italia, Japón,
Luxemburgo, México, Nicaragua, Nueva Zelandia, Panamá, Paraguay, Polonia,
Puerto Rico, Reino Unido, República Checa, República Dominicana, Rusia, Serbia
y Montenegro, Singapur, Sudáfrica, Suecia, Suiza, Uruguay y Venezuela.
El cual representa un ingreso de
remesas al Perú de aproximadamente 14 millones, en un promedio mensual de
$170.00 destinados al consumo y ahorro por familia en más de 400,000
hogares-familias del Perú receptores de remesas en los departamentos de Callao
(12.5%), Lima 11.4%), La
Libertad (8.8%), Ancash (6.7%), Arequipa (5.4%), Lambayeque
(5.0%), Ica (4.9%), Madre de Dios (4.1%), Loreto (3.8%), y Junín (3.6%), y
otros (1.1%).
Según el estudio del Banco
Interamericano de Desarrollo (BID- 2008) el envío de remesas de todo el mundo a
Latinoamérica alcanzo aproximadamente a U$66,500 millones de dólares en el año
2007, un 7% más que el año 2006. México sus remezas se totalizaron en U$23,979
millones, el Brasil en U$7,075 millones, Colombia fue el tercer país con total
de remesas de U$4,520 millones de dólares, Guatemala con un total de remesas
U$4,128 millones de dólares, El Salvador U$3,695 millones de dólares, República
Dominica U$3,120 millones, Ecuador U$3,805 millones y el Perú U$2,900 millones
de dólares en el año 2007 lo que represento el 2% PBI.
Según la información del Banco Central
de Reserva del Perú (BCR), el monto de las remesas durante el 2006 fue de $
1,837 millones, mientras que en el 2007 la cifra se elevo a U$ 2,131 millones y
el pasado ano cerro en U$ 2,437 millones, mostrado una tendencia ascendente.
Según el BID, un 60% de personas que reciben las usan en gastos básicos y un
21% las destina a educación. Estos puentes simbólicos e imaginarios entre el
país de residencia y el país de origen, creado por las remesas económicas a las
familias y la economía peruana a través de los pagos de impuestos por las
transacciones y el proceso de movimiento económico entre la banca internacional
y la banca nacional; por que las remezas están destinadas a los gastos básicos
de la familia y a la educación primariamente. En este sentido las comunidades
transnacionales pueden entenderse como ámbitos de mediación en una doble
acepción, que se configura y en los procesos sociales de la acción social:
migrar, intercambios, flujos de información-Internet-blogs- reciprocidad, en
términos de pasado y futuro, esto es en términos de la transformación de las
condiciones en las cuales dicha acción social se desarrolla.
35 Congresistas vs. El voto Transnacional de la Diáspora Peruana
En la última elección el número de peruanos que fueron habilitados para votar en el extranjero fue de 457,891 mil peruanos, y solo 290,728 peruanos votaron en el exterior. Esto refleja que el número de votantes en el exterior quedo muy debajo de toda proyección, pero esto es resultado de un sistema electoral pensado, diseñado en no facilitar la participación electoral desde el extranjero.
Sin embargo los peruanos se encuentran
inadecuadamente representados. Es decir que en el momento de distribuir los
escaños, se decide que los peruanos en el extranjero deben votar por los
candidatos de Lima. Todo un despropósito, pues el elector que vota en una
circunscripción está habilitado también para representar al conjunto de sus
votantes. Así es para todos los peruanos que residen en Lima, pero no a los
peruanos residentes en el extranjero, por que el voto es solo por candidatos de
Lima, pero no pueden representar a Lima, es decir se convierte un votante de
segunda clase, pues puede votar pero no ser elegidos. Y no pueden hacerlo
porque no viven en Lima. En el caso peruano los migrantes peruanos en el
exterior solo tienen el derecho al voto, mas no a ser elegidos o postular por
un puesto en el congreso.
Nuestro estudio revela que los 35
congresistas de Lima electos con el voto transnacional, que viene
demostrándonos su falta de representatividad, pues ni siquiera han tomado
ninguna iniciativa con respecto a las diásporas en política migratoria pública,
en esquemas institucionales de acercamiento y programas gubernamentales de
atención a la diáspora y las organizaciones de migrantes en derechos políticos
para la diáspora en el país receptor y de origen.
El ejercicio del voto transnacional
significó un impacto político en los 35 congresistas de Lima, por que el hecho
que peruanos radicados en diversos países hecho presentes, muestra una gran
dispersión de la diáspora peruana y su necesidad de participar en la vida
política del país de origen, el sentimiento de peruanidad se extiende donde el
Estado peruano no tuvo la competencia de atender sus necesidades. Demás están
los argumentos de que el número de votantes en el exterior son irrelevantes,
cada voto representa una historia migratoria, una decisión de vida; ya las
comunidades peruanas dispersas en el mundo, por más pequeñas que ellas sean, es
una historia por contar.
Distrito Electoral
Nuestro estudio nos revela que nunca un
congresista de Lima habla de los intereses y problemas de los 3’000,000
millones de peruanos que viven en el extranjero, no se sienten que los
representa y no se sienten obligados. Esto se refleja en la falta de política y
propuestas legislativa en relación la comunidad peruana residente en el
exterior. La falta de encuestas especializadas en el tema impide hacer una
proyección estadística confiable del número de migrantes peruanos en el
exterior. En un reciente estudio de la Migración Internacional
de Peruanos 1990-2007, del Instituto Nacional de Estadística e Informática
indica que entre 1990-2007, 1’940.817 peruanos emigraron al exterior
legalmente: América 1’299,395 de ellos 665,616 mujeres y 633,769 hombres,
Europa 551,189 peruanos, 282,349 mujeres y 258,840 hombres, Asia 76,700
peruanos, 39,290 mujeres y 37,410 hombres y hacia Oceanía y África 13,543
peruanos, 6,937 mujeres y 6,605 hombres. Y en periodo de 1994 - 2007 la DIGEMIN emitió un total de
3’726,144 pasaportes. La brecha entre la migración legal de 1’940,817 y el
número de pasaporte de 3’726,144.
Este vacío entre el movimiento
migratorio de salida y la emisión de pasaporte nos con lleva a estimar una
cifra de aproximadamente de 3’000,000 de peruanos residiendo en el exterior sin
ningún una representación parlamentaria, pero en el ejercicio electoral de
votar por el país de uno aunque no viva en el. Este sistema electoral excluye
la representación del exterior lo que requiere una reforma electoral.
El Comportamiento electoral de la diáspora peruana y el voto transnacional
La elección del 9 de Abril del 2006
marco el inicio del voto transnacional sin precedentes en la vida política de
los peruanos residentes en el exterior. Algunas de las experiencias electorales
en la historia del voto en el exterior, es el caso italiano donde de un
universo electoral de 4 millones de italianos residentes en el exterior,
votaron cerca de 400,000 en las elecciones de Abril del 2006, y el caso del
Ecuador donde de 3’000,000 millones de ecuatorianos residentes en el exterior,
143, 352 se registraron para votar. En el caso peruano se estima una cifra de
aproximadamente de 3’000,000 de peruanos residiendo en el exterior y se
registraron 457,891 de acuerdo a los padrones electorales, y ejercieron el
derecho del voto 290,728 peruanos.
Una de las grandes sorpresas de la
repuesta a la convocatoria para votar en el exterior fue el amplio abanico de
países de donde se inscribieron y para muchos de ellos posiblemente fue la
primera vez el ejercicio de este derecho transnacional.
Los peruanos que se inscribieron para
votar lo hicieron principalmente de Estados Unidos (593,165 residentes) por la
amplia presencia de la diáspora peruana en diversos estados, y los países que
siguieron en orden de importancia numérica fueron: España (252,995 residentes),
Japón (71,784 residentes), Italia (119,557 residentes), Argentina (271,995
residentes), Venezuela (59,399 residentes), Chile (180,544 residentes), Bolivia
(51,572 residentes), Brasil (39,195 residentes) y Ecuador (33,663 residentes).
Los peruanos que votaron solo fueron
290,278 aunque eran 457,891 los aptos para hacerlos de acuerdo al padrón
electoral. Es evidente que los migrantes vinculan su país de origen con el país
receptor a través del mantenimiento de relaciones sociales en ambos lados de
las fronteras y construyendo un “espacio social transnacional”; y es en este
espacio transnacional que expresan sus preocupaciones políticas y ciudadanas
por él países de origen, en el caso peruano en ejercicio del voto transnacional
para la elección de sus candidatos presidenciales y congresionales.
Su comportamiento político cambia como
resultado de la interrelación con los grupos sociales y políticos en el país de
residencia, y en el intercambio de las experiencias interpersonales y sociales
con otros grupos inmigrantes, se construye un espacio transnacional electoral,
estos espacios son coyunturales y desaparecen terminado el proceso por el que
fue creado, es el caso de los espacios transnacionales electorales, en cual un
conjuntos de connacionales se reúnen con el único proceso de ejercer su derecho
al voto transnacional; mientras se encuentra en el país que residen buscan
realizar cambios a través del voto al país de origen.
Los resultados consolidados de la
votación para la
Presidencia de la República realizada en las 2,510 mesas
electorales de más de 100 puntos de votación que se determinaron en el
exterior, entre los peruanos que votaron la preferencia fueron a la candidata
de la Unidad Nacional ,
Lourdes Flores que alcanzo una votación de 133,871 votos que represento el
58.5% , en contrates a la votación para el candidato Unión por el Perú, Ollanta
Humala con el 12.9% y la votación para el candidato del Partido Aprista
Peruano, Alan García el cual obtuvo 16.91% del voto del exterior, y finalmente
Alianza para el Futuro que obtuvo 5.22% del voto transnacional. Al comparar la
distribución porcentual de los votos para los tres candidatos más votados, la votación
a Lourdes Flores (UN) es más alta en los Estados Unidos (70.83%), seguido de
Ollanta Humala (UPP) siendo Venezuela (23.72%) el país en el que más peruanos
votaron por UPP.
El voto transnacional se puede definir
a partir de la incorporación y participación del individuo en un sistema
transnacional de redes sociales. El ejercicio del voto incorpora a tomar
decisiones desde el país de residencia a su país de origen, este ejercicio
individual se afirma en el discurso político, y las experiencias positivas de
la inmigración, y la globalización informativa. En el caso del Perú, las
preferencias a la candidata Lourdes Flores se reafirman en un discurso
moderado, que reafirma estabilidad imaginaria o simbólica; no necesariamente
real, y rechaza al discurso satanizado y holocaustico. La derecha peruana se ha
caracterizado por un discurso satanizado que excluye y desprecio a la
diversidad étnicas-idiomáticas-multicultural de una sociedad pluricultural
milenaria; y la izquierda se ha caracterizado por un discurso político
holocaustico, que simboliza la búsqueda de la utopia andina en una sociedad
segmentada, donde las diferencias son las preferencias del discurso político.
El voto transnacional en la elecciones del 2006 reflejo una respuesta a la
perdida de la perspectiva del Perú como país y nación; y de los derechos
civiles individuales, sociales, culturales, y políticos de sus connacionales.
Esto es también se reflejo en las preferencias por los nuevos movimientos y
agrupaciones políticas donde el discurso autoritario, mayoral, despótico toma
aceptación.
Creación del Distrito Electoral para la diáspora peruana.
Recientemente se aprobó la creación del Distrito Electoral para los peruanos en el exterior, que tendrá dos (2) escaños, uno para el continente que tenga mayor número de población electoral y el otro para el resto de continentes. Con esta propuesta se pretende superar la falta de representación de los peruanos que residen en el exterior, con la finalidad que sus intereses sean representados en el Parlamento Nacional del Perú donde tendrá 4 y 2 representantes. La iniciativa aprobada con los votos de los congresistas, Alejandro Aguinaga, Luis Gonzales Posada, Álvaro Gutiérrez, Karina Beteta y Rolando Sousa, fue presentada por el Grupo Fujimorista y el Grupo Nacionalista Unión por el Perú y se sustenta en el artículo 2º y el artículo 31º de
La elección de Congresistas a que se refiere el artículo 90º de