Una semblanza para la reflexión de los paralelos de la cultura peruana entre vivos y plebeyos
Una semblanza para la reflexión de los paralelos de la cultura peruana entre vivos y plebeyos
Los peruanos de los diversos segmentos
sociales del Perú tienen en común el violar cualquier tipo de regla, ley o
reglamento, es una fascinación orgásmica, el buscar, crear o idear alguna
tranpita para no cumplir con las obligaciones y deberes de un ciudadano.
Comprar libros piratas, vender productos adulterados sin importar la tragedia
que pueden ocasionar, choferes que manejan ebrios, violar las leyes labores de
la jornada de 8 horas y el pago de horas extras, negar el derecho a la
educación a los niños a vivir una infancia feliz y segura. Hasta podríamos
afirma que la Constitución es un documento simbólico, en más de una ocasión ha
sido violentada y vejada por los golpes de estados en la historia politica del
Perú. Es el Perú un país al revés?, tuvo un presidente que se escudo en la
doble nacionalidad japonesa para evadir las responsabilidades políticas, un
candidato a la presidencia del Perú con doble ciudadanía estadunidense, que
juro bandera por un país extranjero, congresistas con una doble moralidad y doble
ciudadanía, policías que crean sus reglas para recibir coimas, chofer que no
respetan las reglas del tránsito ni la vida de los transeúntes, barristas que
convierten un partido de futbol en una tragedia nacional, niños ambulantes
abusados frente a la indiferencia de la sociedad, una sociedad racialmente
segmentada por la idiosincrasia, una sociedad de vivos y plebeyos como remarca
el presente video. Carlos Tomas Temoche nos presenta una reflexión desde la
cultura y de jóvenes actores con sana energía para revertir las energías
destructivas - que señala el video - en energías constructivas con la presencia
del arte como una necesidad de comunicación en todos los tiempos y espacios.
Jorge Yeshayahu Gonzales-Lara
Editor, La Diaspora Peruana
Por: Carlos Tomás
Temoche v.
El último miércoles 14 de Julio 2010, fui invitado como jurado de
evaluación del desfile escolar en el distrito de San Miguel. Ahora hay el
acierto de acompañar los tradicionales desfiles escolares con Pasacalles
teatrales. Como todo lo que sucede está inmerso en un contexto, me provocó acompañar
este apunte con el video adjunto de la Universidad de Lima, enviado hace unos
meses por Luchito Paredes y cedido gentilmente por Rafael Hernández. Disfruten
el video:
Si, también
se pueden revertir las energías destructivas - que señala el video - en
energías constructivas con la presencia del arte como una necesidad de
comunicación en todos los tiempos y espacios. Digo, es un decir. El desfile
escolar y pasacalle celebrado en el distrito de San Miguel, es una medida
acertada de la Casa de la Cultura de ese distrito, hábilmente dirigido por
Carmen Márquez. Pude constatar que fue una pincelada de color y calor en el
frío invierno limeño.
Me atrajo la invitación que decía - entre otras cosas - "Frente a la exaltación de valores militares y bélicos de los desfiles escolares, aquí se resaltan valores democráticos pertenecientes a una cultura de paz”. Habría de agregar que la psicología del menor es sui géneris acorde a su edad, donde no sólo hay cambios en las variaciones fisonómicas, orgánicas y biológicas. La psiquis del menor no es igual a la del adulto. Por eso en estos desfiles, queda bien resaltar la conciencia en la defensa de nuestras fronteras, también la defensa de nuestros valores y el profundo sentimiento de amor a la patria; por eso ahora algunos colegios también desfilan con coloridos pasacalles.
Estas
actividades canalizan creativamente las energías infantiles y juveniles para
lograr la madurez psíquica que tanto reclamamos. Fue agradable visualmente ver
a la señora de Cao, al señor de Sipan y al Chullachaqui selvático. Ahora son
láminas escolares en vivo y en directo. Así se materializa el pensamiento, se
concretiza la abstracción. Los niños y jóvenes se divierten creativamente y se
sienten bien. La mayoría de danzas y representaciones aluden al trabajo del hombre
de la costa, de la sierra y selva.
PATRIA SON TAMBIÉN NUESTROS HERMANOS CULTIVANDO LA TIERRA
Lo pongo en
mayúscula. Hay un rescate de nuestras danzas ancestrales como el colorido Son
de los Diablos que arrancó sonoros aplausos. Los muchachos tienen mucha
sandunga, el fino grano de sal del vals limeño. Aquí la desterrada ternura sí
está presente. Es la alternativa a ambientes sociales ingratos y atmósferas
violentas destructivas. Si se fomentaran más estas actividades podemos dar
alternativas a la inseguridad, angustia, desconfianza mutua, abismos de temor y
racismo, inferioridad en valores, rebeldía injustificada, odio al prójimo,
discriminación, etc.
Pero en el
currículo escolar el cultivo del arte no debe ser una dádiva, ni ponerse de
yapa y en horarios inadecuados. Ya existe la recreación como un derecho humano
patrocinado por la Naciones Unidas. Toca al estado promover y fomentar más
estas actividades y a los padres de familia apoyarlos. Yo cuando desarrollé un
taller de teatro en San Martín de Porres invité a los padres para que
asistieran como espectadores.
Ellos vieron
en vivo y en directo como el arte desarrolla la atención, la sensibilidad,
observación, memoria y convierte a los niños en esponjas para aprender otras
asignaturas. Adiós falta de comprensión de la lectura con el teatro. Sobre todo
el arte da atención a la cooperación, solidaridad y amor al prójimo. Los padres
se agenciaron de novedosas técnicas de comunicación con sus hijos, eran los que
más se divertían y asistían puntualmente. Si la humanidad siempre ha padecido
de conflictos generacionales, al arte siempre fue motor de progreso.
Hoy existe
una velocidad vertiginosa con el desarrollo tecnológico de los medios de
comunicación audiovisual. El mundo es una aldea donde nos enteramos al instante
hasta de la existencia de un cefalópodo pitoniso. Pero esta velocidad no va
acorde con el lento progreso filosófico, sociológico, político y moral; pero el
arte puede aminorar esta disociación. Reconocernos, mirarnos en nuestras danzas
ancestrales de rica vistosidad, de fuerza telúrica; contrarresta también la
desvirtuación de la verdad en la sociedad, donde se da cobertura al escándalo
en la mayoría de medios de comunicación.
Temor y violencia son generados cuando estos medios se usan sólo con fines mercantilistas. Y los medios de comunicación no son ni buenos ni malos, bien canalizados desarrollan un poder constructivo, educacional y cultural. Si la televisión desintegra el arte integra. El arte es una luz de esperanza.
Finalmente,
porque no recurrir al arte y a la cultura ahora que las pandillas han dejado de
ser un problema exclusivo del centro de la ciudad. El sociólogo Jorge Yeshayahu
Gonzales-Lara, estima que hay 539 pandillas en el país, yo creo que más. Si la
pandilla se desarrolla a través de un código de lealtad al jefe de la misma y
es un lugar que los acoge en ese sentimiento de separatidad que acompaña a
nuestros jóvenes, el cultivo del arte de manera holística puede ser una de las
soluciones.
Para concluir este apunte, en los pasacalles están presentes los puntos de encuentro con la cultura popular de la cosmovisión andina :- ALLINTA MUNAY, engloba en una sola palabra los valores, la moral, el principio de integridad, la autoestima personal, el deseo de superación que fue el punto de arranque del Imperio Incaico.- ALLINTA LLACHAY, el conocimiento, aprender lo bueno, capacitación para vencer y demoler obstáculos.- ALLINTA RUHAY, que es el hacer, lo que hacemos hay que hacerlo bien, hazlo con amor, amor al trabajo, al ahorro.
Lima Peru, Carlos Tomás Temoche v.